Zapatero, el ultraliberal, es el presidente de España más creativo de la democracia. Sin lugar a dudas, militarizar a un cuerpo de trabajadores civiles para acabar con su derecho a la huelga y a la asociación sindical no tiene parangón desde que el 6 de diciembre de 1978 se aprobó la Constitución Española.
Eso sí, aplicarles el derecho penal militar mediante la declaración del estado de alarma no sé si es compatible con el artículo 117.5 de dicha constitución:
117.5. [hablando del Poder Judicial] El principio de unidad jurisdiccional es la base de la organización y funcionamiento de los Tribunales. La Ley regulará el ejercicio de la jurisdicción militar en el ámbito estrictamente castrense y en los supuestos de estado de sitio, de acuerdo con los principios de la Constitución.
¿Qué será lo siguiente? ¿Militarizar a todo el colectivo de funcionarios para poder aplicar los recortes necesarios para salvar a la banca? ¿Perseguir a Wikileaks por terroristas y acabar con la neutralidad de la red?
Y es que cuando las autoridades pisotean los derechos y libertades de los ciudadanos (aunque sea de un colectivo pequeño) el peligro totalitario se cierne sobre toda la sociedad aunque la gente esté muy contenta de que hayan jodido a esos privilegiados.
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